Los implantes dentales tal como los conocemos hoy en día fueron inventados en 1952 por un cirujano ortopédico sueco llamado Per-Ingvar Brånemark. Hoy en día, se acepta como el estándar de atención para el tratamiento protésico de dientes faltantes en odontología.
Un implante dental es un producto dental que se coloca en la mandíbula durante el procedimiento quirúrgico y se fusiona con el hueso en unos pocos meses. Un implante dental reemplaza la raíz de un diente faltante y sirve para formar un diente o puente de reemplazo. Los implantes dentales fusionados al maxilar son la solución más parecida a un diente natural porque muestran años de estabilidad cuando se sostienen por sí solos sin afectar los dientes cercanos. El proceso de fusión entre el implante dental y el maxilar se denomina «osteointegración». La mayoría de los implantes dentales están fabricados en titanio, lo que les permite integrarse con el hueso sin ser reconocidos como un cuerpo extraño en nuestro cuerpo. Con el tiempo, la tecnología y la ciencia han avanzado de manera que han mejorado mucho los resultados de la colocación de implantes dentales. Hoy en día, la tasa de éxito de los implantes dentales correctamente aplicados se acerca al 98%.
¿Por qué implante dental?
Los implantes dentales se pueden utilizar para reemplazar un solo diente, varios dientes o todos los dientes. El propósito de la prótesis dental en odontología es restaurar tanto la función como la estética.
A la hora de renovar los dientes, suele haber tres opciones:
- Prótesis total o parcial removible
- Puente dental fijo
- Implante dental
Las dentaduras postizas son una opción más asequible para los dientes de reemplazo, pero son menos preferidas debido a la incomodidad de un aparato removible en la boca. Además, las dentaduras postizas pueden afectar el gusto y la experiencia sensorial de una persona con los alimentos.
Antes de la introducción relativamente reciente del tratamiento con implantes dentales, los puentes dentales eran la opción de restauración más común. La principal desventaja de los puentes es su dependencia de los dientes naturales existentes como soporte. Los implantes solo están soportados por hueso y no afectan los dientes naturales circundantes. Decidir qué opción elegir depende de muchos factores. Especialmente para los implantes dentales, podemos especificar estos factores de la siguiente manera:
- Diente faltante o ubicación de los dientes
- La cantidad y calidad de la mandíbula donde se colocará el implante dental.
- Estado general de salud del paciente
- Costos
- Preferencia del paciente
Un cirujano dental examina el área a considerar para un implante dental y realiza una evaluación clínica de si el paciente es un buen candidato para un implante dental.
Elegir un implante dental para la sustitución de un diente tiene grandes ventajas frente a otras opciones. Los implantes dentales son conservadores en el sentido de que los dientes perdidos se pueden reemplazar sin afectar o reemplazar los dientes adyacentes. Además, debido a que los implantes dentales están integrados en la estructura ósea, son muy estables y pueden tener el aspecto y la sensación de los propios dientes naturales.
